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San Juan, PR / 10 de noviembre de 2021 – El representante José “Cheito” Rivera Madera se mostró satisfecho con la determinación de la mayoría de sus compañeros en la Cámara de aprobar el Proyecto PC-17 y espera que, el Senado acoja con su voto a favor esta medida que, de ser aprobada y firmada por el gobernador Pedro Pierluisi daría paso a la creación de mecanismos que evitarían el cierre arbitrario de más planteles escolares.
La medida aprobada en la Cámara de Representantes enmendaría la Ley 85 de 2018, conocida como “Ley de Reforma Educativa de Puerto Rico”, con el propósito de garantizar que el cierre de planteles escolares sea precedido por un exhaustivo estudio de necesidad y viabilidad, tomando en consideración las particularidades de cada región de la isla y las realidades socioeconómicas de la población.
“Si el Senado ratifica esta medida y es convertida en ley por el gobernador (Pierluisi), estaremos evitando que continúe el cierre de escuelas de manera indiscriminada. Fueron cerca de 400 los planteles eliminados sin tomar en consideración la realidad de cada sector, en particular sus retos sociales y económicos. Esto lesionó severamente los diversos municipios y creó situaciones adversas que van desde la proliferación de estructuras abandonadas, que se convierten en estorbos públicos, hasta nuevos desafíos en la logística para la formación de la niñez”, sostuvo Rivera Madera.
Al presentar el proyecto el Legislador había explicado que luego de los terremotos que experimentaron algunos pueblos de la zona sur el pasado año, precisamente, las escuelas cerradas vinieron a ser la alternativa para sustituir las afectadas por los sismos, “lo que evidenció que antes de cerrar un solo plantel se deben considerar razones que vayan más allá de la matrícula”.
“Hoy, cuando un estudio advierte sobre la alarmante realidad de que entre el 2015 al 2021 cerca de 33 mil estudiantes abandonaron las escuelas, muchos lanzándose a la deserción escolar, lo menos que debemos promover es que continúen las acciones gubernamentales que en lugar de motivar a nuestros estudiantes los desalientan. El asistir al lugar donde ven a sus amigos, vecinos, están cerca de sus residencias o familiares, definitivamente les motiva asistir a clases. Es un principio humano natural el sentirse protegido alrededor de los suyos. Además, los maestros, al conocer el entorno de cada estudiante pueden atender de manera más efectiva sus necesidades particulares” explicó Rivera Madera.
De otra parte, Rivera Madera expresó preocupación con la actitud asumida por el gobernador Pierluisi en temas relacionados a la educación y los planteles del sur de la isla, por lo que espera en su momento el primer ejecutivo, “no le dé la espalda a este proyecto tan vital para crear estabilidad emocional entre los estudiantes y maestros que cada año, al recesar las clases, se cuestionan si su escuela será la próxima en ser clausurada”.
