Por: Alison Rodríguez / Periódico El Sol de Puerto Rico
Lo que comenzó siendo un aviso de sequía para los pueblos de la zona central de la Isla, ahora se ha extendido hasta las zonas del noroeste y sur, acaparando un 22% de Puerto Rico esto según el informe del Monitor de Sequía de los Estados Unidos emitido el 14 de febrero.
Hasta el momento son 24 los municipios que se encuentran bajo sequía moderada: Lajas, Cabo Rojo, Guánica, Sabana Grande, San Germán, Yauco, Guayanilla, Peñuelas, Ponce, Juana Díaz, Santa Isabel, Coamo, Guayama, Salinas, Cayey, Ciales, Morovis, Orocovis, Corozal, Barranquitas, Naranjito, Aibonito, Comerío y Cidra.
Ante el panorama, la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) comenzará desde el viernes 22 de febrero un plan de interrupción de servicios del agua durante 24 horas a los municipios de Aguada Isabela, Aguadilla Moca y Rincón. Este plan de racionamiento podría extenderse a otras zonas conforme la sequía se intensifique.
Embalse de Guajataca y racionamiento
En una entrevista para Periódico El Sol de PR, el líder del Departamento de Meteorología de Trayecto Meteorológico del Caribe, Kevin Martínez indicó que la clasificación de sequía se expandió hacia los pueblos del noroeste hasta cubrir la cuenca del lago Guajataca.
‘‘Este embalse se encuentra en niveles de ajustes operacionales desde el pasado 17 de enero de 2019 y continúa bajando sus niveles a razón de 3 a 4 centímetros diariamente. La causa principal de lo que se está experimentando en Guajataca surge a raíz de la bajada intencionada en sus niveles de agua para reparar los daños que sufrió la represa de dicho embalse tras el paso del huracán María’’, sostuvo Martínez.
‘‘En esta zona se ha venido arrastrando un déficit de lluvia de 4 a 8 pulgadas por los pasados tres meses, por lo que el lago no logró recuperarse y ahora estamos viendo las consecuencias. Por ambas razones (déficit de lluvia y el bajo nivel del lago Guajataca) el monitor de sequía decidió incluir la zona noroeste bajo la clasificación de ‘anormalmente seco’”, añadió.
Por su parte, la AAA notificó a través de su cuenta de Twitter que hasta el momento, son 60,000 abonados los que se verán afectados debido al racionamiento. Todos ellos se suplen del Embalse de Guajataca.
Efectos de la sequía en Puerto Rico
Dependiendo el tipo de sequía, sus efectos pueden variar. Martínez explicó que existen cuatro tipos:
- Meteorológica– Déficit de lluvia por un periodo de tiempo considerable. Esto es lo que hemos estado experimentando desde junio de 2018.
- Agrícola– Periodo con deficiencia de humedad en el suelo y posterior agravamiento en el crecimiento y producción de cultivo.
- Hidrológica– Disminución inusual en los niveles de ríos y capacidad de lagos y embalses.
- Socioeconómica– La sequía es lo suficientemente intensa que comienza a afectar a las personas y comienzan a generarse pérdidas económicas.
‘‘Actualmente Puerto Rico se encuentra pasando por las primeras dos fases. El caso de Guajataca es uno aparte, ya que fue provocado por el ser humano por las razones de reparación. En otras palabras, una sequía moderada supone un impacto principal a la agricultura con una ralentización en el crecimiento de las plantas debido a la sequedad de los suelos, un mayor potencial del desarrollo y propagación de incendios forestales y también se pueden aplicar restricciones del uso del agua de forma voluntaria para evitar que empeore la situación’’, comunicó.
¿Qué medidas debemos tomar ante la sequía?
La AAA ha iniciando una campaña a través de sus redes sociales bajo las hashtags: #GotaAGotaSeAgota #Consérvala #EmbalseGuajataca y han sugerido a la comunidad a que instalen un pistero de manguera en hogar con el propósito de controlar la cantidad y presión del agua.
Por su parte Martínez brindó a este medio, sencillos ajustes y recomendaciones a tener en cuenta durante este periodo:
- Hacer uso prudente del agua. Cerrar el grifo, no deje llaves abiertas.
- Proteger las fuentes de agua naturales y artificiales.
- Utilizar sistemas de riego que permitan el mejor uso de agua. Si es posible, almacene agua de lluvia para utilizarla en el riego de cultivo.
- No queme árboles ni vegetación por dos razones: como el suelo está secándose puede iniciar un incendio de grandes proporciones y porque reseca aún más el suelo.
- Mantenga estrictas medidas sanitarias para evitar posibles enfermedades.
