Salud en Puerto Rico Ante la Población que se Reduce y Envejece
Por Claritza Rodríguez Merlo / Periódico El Sol de PR
Cada día los servicios de salud y otros sectores enfrentan transformaciones y retos acorde a las necesidades de la población servida. A nivel nacional la necesidad de crear nuevos servicios e innovar es la orden del día tanto para proveedores de salud como para clientes. Ya se están enfocando en hospitales para el futuro, en donde se debe mantener la eficiencia y compromiso en el manejo y la prestación de servicios, optimizando la operación de los hospitales con menos estadías, reducir re-admisiones y ofrecer más servicios comunitarios con énfasis en prevención y autocuidado.
Merece una atención cuidadosa los datos de aumento poblacional de adultos mayores. Según datos oficiales ofrecidos por la Sra. Judith Rodriguez, Demógrafa, la población en Puerto Rico se ha reducido en más de un 15% entre los años 2000 y 2019 a causa de factores como la depresión económica, la emigración y como dato interesante la reducción notable de nacimientos. Enfatiza que por primera vez existan más muertes que nacimientos. Es significativo señalar que el crecimiento poblacional se basa en la relación entre nacimientos y defunciones y que para la década del 80 hasta el 2017 se reportó un 2.1% más de muertes que nacimientos.
El Censo de Estados Unidos ha hecho unas proyecciones para la población de Puerto Rico. Auguran que entre los años 2020 y 2040 habrá una reducción sustancial de un 25%, es decir una reducción mayor de la que hemos visto en estas primeras dos décadas del siglo. Una población aproximada de 2.45 millones que equivale a la población de Puerto Rico en el año 1960. La explicación para esto es que la reducción poblacional continuará por diversos factores. Acorde a la proyección del Censo en el 2020 la población será de 3.2 millones y se reducirá en 12% a 2.8 millones en el 2030 y en la década siguiente se reducirá un 13% para una población de 2.45 millones antes mencionado.
La migración de la población joven en sus etapas productivas y reproductivas contribuyen al descenso de la natalidad, por consiguiente los nacimientos en hospitales ya se ha visto afectados. También debemos considerar otros factores que afectan la población joven que muere día a día por accidentes, drogas, alcohol, criminalidad, esto sin dejar de mencionar las muertes en la población adulta por condiciones, traumas, etc.
El crecimiento de emigración de puertorriqueños hacia los Estados Unidos en especial hacia la Florida equivale una tercera parte de la población total actual de Puerto Rico. Como dato estadístico interesante la mediana de la edad se usa como medida para mostrar la forma contundente del envejecimiento de la población y en Puerto Rico en el 1980 la mediana de edad fue de 18 años y actualmente es de 41.4 años. Puerto Rico tiene una de las medianas de edad más alta del mundo; inclusive más alta que en los Estados Unidos. Tan es así que en E.U. se proyecta para el año 2035, es cuando su población habrá más personas mayores de 65 años que personas de 18 años o más.
Puerto Rico tiene un crecimiento acelerado de población envejecientes. Día a día en noticieros, festejos de cumpleañeros se visualiza un aumento de población sobre los 100 años. Esto muestra una vulnerabilidad hacia esta población de envejecientes donde se destaca un 39% bajo nivel de pobreza, con más condiciones crónicas, mayor demanda del seguro de salud gubernamental, más beneficiarios del Programa de Asistencia Nutricional (PAN), un 87% de recibir pensiones reducidas del seguro social, donde solo un 31% recibe pensión de sistema de retiro y 9.7% con alguna asistencia pública adicional. En Puerto Rico los niveles de pobreza y desempleo representan un impacto para el seguro de salud público. Seis de cada diez personas en P.R. tienen seguro público de salud y 4 tienen el seguro privado. Datos estadísticos indican que solo un 34.5% de la población de 16 años o más esta empleada a tiempo completo (35 horas a la semana o más) mientras que un 15% trabaja menos de 34 horas semanales. Señala la demógrafa que este grupo entra al nivel de pobreza y participan también del plan del seguro público de salud. Existen nuevos retos y requerimientos y retos para el 2020 con el plan de seguro público en los hospitales por lo cual ya se están comenzando a trabajar al respecto
La vulnerabilidad de la población envejeciente es preocupante ya que la mayoría de ellos viven solos, 48.8 % tienen algún impedimento y la necesidad de cuido 24/7 y por consiguiente los servicios de salud va en aumento. Señala la demógrafa que el 81.5% de los jefes de hogares de edad avanzada son dueños de sus propias casas, adultos mayores con un nivel de pobreza bajo, razón por la cual es preciso tener cautela con aumentos en los impuestos a la propiedad ya que afectaría mucho esta población. Tales preocupaciones podrían afectar su salud física, mental y emocional, demandando más servicios de los proveedores de salud. El reto para la atención a dicha población ya se está enfrentando, requiere de esfuerzo, trabajo en equipo multidisciplinario de los proveedores de salud y del gobierno de Puerto Rico con presupuesto requerido y la intervención efectiva de la diversidad de agencias gubernamentales que le ofrecen sus servicios. Además se requiere el compromiso individual, familiar y comunitario para contribuir a mejorar la calidad de vida con nuestra población que se reduce y envejece. El compromiso es de todos a nivel isla.
Referencia: HOSPITALES, Publicación Oficial de la Asociación de Hospitales de Puerto Rico, Censo de Puerto Rico
