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Irizarry Pabón: mezcla de satisfacción y desastre administrativo

Irizarry Pabón: mezcla de satisfacción y desastre administrativo

A una semana de iniciar mandato en la ciudad de Ponce

Por Agustin Muñoz/El Sol de Puerto Rico

Al transcurrir la primera semana como alcalde de Ponce, el doctor Luis M. Irizarry Pabón asegura que ha tenido “muchas satisfacciones”, pero alega que lo que heredó de la administración anterior fue “un desastre”. 

Irizarry Pabón juró como alcalde el 13 de enero y desde entonces realiza visitas a las dependencias municipales para conocer el sentir del personal y el estatus de diversos proyectos. Asimismo, se ha reunido con grupos externos al ente municipal de cara a la ejecución de su programa de gobierno.

Explicó que en sus reuniones con los trabajadores del municipio “he visto mucha alegría y mucha esperanza de que este nuevo gobierno sea diferente”. “Les he dicho que este va a ser un gobierno de respeto, que aquí no se va a perseguir a nadie. He visto empleados llorando porque sufrieron mucha persecución, mucho maltrato y faltas de respeto”, dijo.

El nuevo funcionario reconoce que los primeros días y meses de su administración serán de “luna de miel”, pero ello no lo sustrae del contenido negativo de los informes que recibe sobre la operación municipal. Aceptó que la exalcaldesa María E. Meléndez Altieri le dejó $15 millones en caja, pero aseguró que esa cifra contrasta con una deuda a los suplidores que alcanza unos $82 millones. De hecho, afirmó que tratará de llegar a acuerdos de pago con esos suplidores.

Precisamente, destacó que antes de los cien días de su administración tendrá en su escritorio el resultado de la auditoría forense que ordenó. Dijo que si esa auditoría confirma “todas las sospechas que tenemos de irregularidades” buscará que se sancione a los responsables.

Según la evidencia recibida, para Irizarry Pabón la ciudad de Ponce no (no) tuvo una administración municipal por los pasados doce años. Dijo que fue incoherente y disfuncional en donde cada dependencia “trabajaba por sí sola” y con dejadez. Incluso, describió que la oficina de Meléndez Altieri como alcaldesa “estaba abandonada y todo regado”. “Es todo un desastre lo que encontramos allí”, subrayó.

Por otro lado, defendió las medidas iniciales sobre los trabajadores transitorios al sostener que la mayoría los casi 400 involucrados fueron contratados ilegalmente durante el período en que el horario de los empleados regulares fue reducido a la mitad. “Nosotros no hemos despedido a nadie. De esos que quedaron sin contrato el 12 de enero, esos que tenían contratos de principio y final, ya hemos recuperado como a 90 empleados”, destacó.  Explicó que el 90 por ciento de esos empleados transitorios contratados por Meléndez Altieri fue a jornada completa en contraste con la jornada reducida del personal regular.

“A esos empleados la exalcaldesa les creó la falsa expectativa de continuidad y si vengo a hacer un gobierno correcto y de poner las cosas en orden, lamentablemente muchos de esos empleados no podrán ser contratados de nuevo porque no va a haber la capacidad económica para pagarles”, ratificó el alcalde del PPD.

Igualmente señaló que si no puede reintegrar a los empleados regulares a su jornada habitual en los primeros cien días de su administración trabajará para que se haga realidad antes de fin de año.

Durante el diálogo con El Sol de Puerto Rico, Irizarry Pabón dijo que espera por un informe sobre las finanzas municipales, aunque anticipó que el gobierno de Meléndez Altieri utilizó más del 50 por ciento del presupuesto anual del municipio. Basa su apreciación en que supuestamente el presupuesto presentado para el período 2020-2021, ascendente a $95 millones, fue “inflado” en sobre $20 millones. Recordó que los Estados Financieros de los dos años fiscales anteriores revelaron que el municipio recuperó alrededor de $74 millones, es decir, menos del monto presupuestado.

De otro lado, el alcalde de Ponce se fijará en reactivar la economía de la ciudad en sus primeros tres meses de gestión. Una de las medidas que impulsa es reducir las tasas contributivas municipales para estimular el regreso de la actividad comercial a la Perla del Sur. 

Otra actividad que está en la agenda del funcionario es la cultural. Dijo que una vez se supere la pandemia se estimularán diversas actividades culturales para que la ciudad recobre el nombre de “señorial”. Además, informó que enfatizará en el turismo cristiano, deportivo, médico y otros. 

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