Cómo se forma una tormenta tropical
Por Agustín Muñoz Santiago/El Sol de Puerto Rico
La zona de Puerto Rico, con énfasis en la región sureste, suroeste y noreste, es ruta de viaje de muchos fenómenos naturales tropicales que nacen de sistemas de tormentas lejos de la costa oeste del norte de África. A pesar de la familiaridad del puertorriqueño con las tormentas tropicales, mucho se desconoce de su formación.
Los ciclones tropicales son como motores gigantes que usan aire cálido y húmedo como combustible, dice la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio NASA). Por eso, se forman sólo sobre océanos de agua templada, cerca del ecuador. El aire cálido y húmedo sobre los océanos se eleva desde cerca de la superficie. Como el aire se mueve hacia arriba y se aleja de la superficie, queda menos aire cerca de la superficie, agrega.
Sigue que el aire con mayor presión de las áreas circundantes llena el área de baja presión. Luego, este «nuevo» aire se torna cálido y húmedo y también se eleva. En la medida en que el aire cálido continúa subiendo, el aire circundante gira para ocupar su lugar. Cuando el aire cálido y húmedo se eleva y se enfría, el agua en el aire forma nubes. Todo el sistema de nubes y aire gira y crece, alimentado por el calor del océano y el agua que se evapora de la superficie. Entonces, las tormentas que se forman al norte del ecuador giran en sentido contrario a las manecillas del reloj. Las tormentas al sur del ecuador, giran en el sentido de las manecillas del reloj. Esta diferencia se debe a que la Tierra gira sobre su eje. Así, al girar el sistema de tormenta cada vez más rápido, se forma un ojo en el centro. En el ojo todo es muy tranquilo y claro, con una presión de aire muy baja. El aire de presión alta superior baja hacia el interior del ojo, ilustra el organismo espacial.
Está entendido que las tormentas tropicales se clasifican de acuerdo con la intensidad de sus vientos. Por ejemplo, una depresión tropical, tiene vientos máximos sostenidos menores a 39 millas por hora, mientras que se dice que es una tormenta tropical cuando sus vientos máximos sostenidos fluctuan entre 40 y 73 millas por hora, pero limitado a la zona interior y cerca del centro. Con esas características, al ciclón tropical se le pone un nombre de persona que puede ser en español, inglés o francés, en orden alfabético. Se le conoce como huracán, una vez sus vientos máximos sostenidos exceden las 74 millas alrededor del centro, llamado ojo del huracán.
Una vez el huracán pierde su intensidad, se degrada invirtiendo esa misma clasificación.
Los nombres escogidos para la temporada de huracanes de este 2021 son Ana, Bill,Claudette (se usó en los años 70), Danny, Elsa, Fred, Grace. Henri, Ida, Julian, Kate, Larry, Mindy, Nicholas, Odette, Peter, Rose, Sam, Teresa, Víctor y Wanda.
Los expertos sostienen que, además de las condiciones favorables a los huracanes, como la temperatura y la humedad, muchos fenómenos atmosféricos que se repiten contribuyen a causar e intensificar los ciclones tropicales. Por ejemplo, la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA en inglés) asegura que las ondas orientales africanas son vientos en la baja troposfera (superficie del océano hasta 3 millas por encima) que viajan desde África a velocidades de alrededor de 3 millas por hora hacia el oeste como resultado de lo que se conoce como el Chorro Oriental Africano. Estos vientos se ven desde el mes de abril hasta noviembre. Alrededor del 85% de los huracanes intensos y alrededor del 60% de las tormentas más pequeñas tienen su origen en las olas del este africano.
Otro fenómeno importante de siembra de las tormentas tropicales es la Capa de Aire Sahariana, es decir, una masa de aire seco, rica en minerales y polvorienta que se forma sobre el desierto del Sahara desde finales de la primavera hasta principios del otoño y que se mueve sobre el Atlántico Norte tropical cada 3 a 5 días a velocidades de 22 hasta las 55 millas por hora.
Las agencias meteorológicas subrayan que los huracanes que se forman cerca de la cuenca caribeña se llaman huracanes de Cabo Verde, denominados así por la región donde se forman.