Periódico El Sol de Puerto Rico
(miércoles, 4 de mayo de 2022)- No tomó por sorpresa a los representantes José Rivera Madera y Ángel Matos García, la renuncia del director ejecutivo de La Comisión de Juegos de Puerto Rico (CJPR) Orlando Rivera Carrión, quienes desde hace varias semanas habían solicitado al gobernador Pedro Pierluisi, destituirle su cargo al funcionario, ante señalamientos de actos antiéticos y que fueran denunciados por el representante ante la Oficina de Ética Gubernamental (OEG).
La Resolución 256 del representante Rivera Madera, dio paso a investigar señalamientos contra Rivera Carrión en el sentido de que el funcionario pudo haber incurrido en conducta inapropiada en todas las ocasiones donde aceptó boletos de avión, estadías y cenas pagas por empresas a las cuales se supone la CJPR audite, fiscalice y otorgue licencias.El origen de los señalamientos fue un chat en el que Rivera Carrión participaba activamente con la apariencia de discutir asuntos relacionadas a las máquinas tragamonedas que serían aceptadas por el ente gubernamental y en donde algunos de los participantes se referían al director de la Comisión como “patrón”. “La falta de juicio, como mínimo, de Rivera Carrión podría tener ribetes antiéticos y mucho más allá, por lo que creo que lo único razonable dentro de sus decisiones ha sido el hecho de que haya renunciado”, expresiones del representante popular.
De acuerdo con la información sustraída del referido chat, así como de la información vertida en las vistas de investigación en la que discutía el Proyecto 1119 de la autoría de Rivera Madera, donde propone la asignación de una partida de las ganancias en esta actividad para el pago del retiro de la policía. Los representantes Rivera Madera y Matos García se personaron a la OEG donde radicaron una querella juramentada solicitando la intervención de este foro investigativo.
“Ya es hora de que las instituciones de nuestro país sean defendidas de cualquier acto que pudiera lacerar su imagen y más aún, una industria como la de juegos en la que se debe priorizar la confianza y seguridad”, indicó Rivera Madera quien adelantó que la renuncia del Comisionado, “no detendrá las investigaciones que iniciamos y en la que sabemos saldrán a relucir la participación indebida de otros funcionarios de esta agencia”. Por su parte, el representante Matos García expresó que, “quedan personas por renunciar en la Comisión de Juegos y estos actos criminales cometidos deben tener consecuencias. Confío que el FBI hará su trabajo”.
