Advierten no bajar la guardia por reducción en tasa de positividad y aparente benignidad de variante Ómicron
Inter News Service / Por Rafael Santiago Medina
San Juan, PR / 2 de febrero de 2022 – Funcionarios de la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtieron hoy que los países deben ser cautelosos con la decisión de levantar las restricciones por el Covid-19, porque podría ser demasiado prematuro.
Señalaron que muchos lugares aún no han alcanzado el pico del aumento de la variante Ómicron, mientras comienza a propagarse su subvariente BA-2 en un grupo bastante nutrido de países del mundo.
Dinamarca relajó todas sus medidas de salud pública, incluido el uso de mascarillas y el aislamiento, confiando en una baja de la tasa de positividad al virus, que podría ser temporal.
Y el país ha tenido una de las tasas de infección más altas en los últimos siete días, según Our World in Data, y tiene, a su vez, una tasa de vacunación relativamente alta: 81 por ciento. Pero aun así, la OMS advierte que no se debe confiar de ello todavía y esperar un poco más.
Otros países que levantaron las restricciones incluyen a Noruega y Australia, alguna vez apodados el “Reino Ermitaño”, donde la estrategia pandémica recientemente cambió de restricciones estrictas como bloqueos y cierres de fronteras a una de “responsabilidad personal”.
“Pedimos precaución, porque muchos países aún no han superado el pico de Ómicron”, dijo Maria Van Kerkhove, líder técnica de la OMS sobre Covid-19, en una sesión informativa en línea. “Muchos países tienen bajos niveles de cobertura de vacunación, con individuos muy vulnerables dentro de sus poblaciones”, añadió.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, expresó su preocupación de que la alta transmisibilidad y la menor gravedad en la patología de las infecciones con Ómicron podrían llevar a los países a decidir que “prevenir la transmisión ya no es posible ni necesario”, y agregó: “Nada podría estar más lejos de la verdad”.
La relativa benignidad de la variante Ómicron entre las personas infectadas que gozan de buena salud ha propiciado la confianza de que un futuro sin el virus está en el horizonte cercano.