Julio del 2021, fecha limite para restitución de jornada laboral
Con la llegada de una nueva administración municipal a la ciudad de Ponce, surge la
esperanza de que a casi 450 de sus trabajadores se les restituya la jornada laboral
completa que les fue reducida por la alcaldesa saliente, María E. Meléndez Altieri.
Aunque esa es la pretensión del liderato de la Asociación de Empleados Municipales
(AEM) y es prioridad del alcalde electo, Luis M. Irizarry Pabón, todo dependerá de lo
que se revele sobre las finanzas municipales durante las sesiones de los comités de
transición. “Se va a examinar dependiendo de lo que encuentre en transición y el
presupuesto heredado”, respondió Irizarry Pabón a este medio.
En ese sentido, Mayra Rivera, presidenta del sindicato, dijo que dialogó con el alcalde
electo y concurrieron en que las audiencias de los grupos de transición determinarán el
curso a seguir sobre la devolución del horario regular de los empleados municipales.
“Sí, se dialogó sobre la restitución y una vez se pase ese cedazo, de acuerdo con las
vistas y se conozca de primera mano cuál es la situación”, contestó Rivera.
No obstante, Rivera explicó que las expectativas de la unión es que a partir del próximo
año fiscal se anuncie el regreso de la jornada completa a los empleados que a la fecha
permanecen con menos de 30 horas semanales de trabajo. “La Asociación de
Empleados Municipales espera que, a mayo del 2021, que debe ser su primer mensaje
de presupuesto, esté anunciando que, en el nuevo año fiscal, el 1 de julio, todos los
empleados municipales van a estar en jornada completa”, subrayó la líder sindical.
Advirtió que si a la fecha señalada no se cumple lo prometido por Irizarry Pabón
“volveremos a la calle, eso él lo sabe”. Citó al próximo alcalde diciendo que “el
empleado municipal no es un gasto, es una inversión”.
Rivera recordó que desde el 3 de noviembre ya ha dialogado con el también médico en
más de cinco ocasiones, contrario a las únicas dos veces que se reunió con Meléndez
Altieri desde que llegó a la alcaldía en 2009.
Conversó que, en una de esas reuniones con Irizarry Pabón, el funcionario electo le
expresó que antes de asumir el cargo desea constituir un grupo de trabajo con
representación de la Asociación y otros representantes de los empleados para
escuchar sus opiniones.
Por otro lado, la presidenta de la AEM insinuó que el incremento a $600 del bono
navideño y el pago de las vacaciones por enfermedad, más que para beneficiar a los
empleados regulares, surgió para favorecer a los funcionarios de confianza de
Meléndez Altieri. Dijo que ambas medidas económicas se podían implementar previo al
resultado de las elecciones.
Cuantificó que hasta el 2016, la administración de la alcaldesa saliente se ahorró unos
$75 millones en salarios no devengados por los trabajadores, así como en beneficios y
aportaciones no pagadas por el municipio. “¿Qué hizo con ese dinero?”, se preguntó y
agregó que en pleitos legales incoados contra su administración Meléndez Altieri ha
pagado alrededor de $2 millones al bufete de abogados Cancio & Nadal cuando el
desembolso por el llamado “enfermito” no superaba los $100 mil al año.