Periódico El Sol de Puerto Rico
Por Agustín Muñoz Santiago
Guánica, PR / 11 de noviembre de 2021 – A casi dos años de la ocurrencia de los temblores en la zona suroeste de la isla, Guánica comenzó el proceso de demolición de 380 estructuras que resultaron malamente averiadas o destruidas por dichos sismos. La primera fase de ese proceso se inició con el derribo de unas 177 unidades.
El alcalde de Guánica, Ismael ‘Titi’ Rodríguez Ramos, señaló que “este ha sido un proceso bien detallado, y naturalmente hubiéramos querido que fuera más rápido, pero ya finalmente se ha autorizado la demolición de 117 casas, es un proceso que conlleva, de manera paralela, la búsqueda de alternativas de vivienda para estas familias”. En el proceso de permisos participaron FEMA, el Departamento de la Vivienda y la Oficina Central de Recuperación, Reconstrucción y Resiliencia (COR3).
Nazario Lugo, de la Asociación de Manejadores de Emergencia y Profesionales de Seguridad (AMEPS), informó que la entidad labora en el cumplimiento de la reglamentación vigente con respecto al destino de los escombros que generarán las demoliciones.
“El manejo de los escombros se inicia con la segregación de lo que es cemento, varillas, incluso los automóviles que quedaron sepultados por la residencia. De los análisis realizados identificamos 15 casas con algún componente de asbesto y plomo. En esos casos se realizó la mitigación de rigor”, explicó Lugo.
El alcalde Rodríguez Ramos dijo que luego de los terremotos, además de tratar del resolver el problema estructural de las viviendas, se insertaron diversas entidades para ayudar a los daminifcados con su salud emocional. “Se ha estado trabajando con depresiones, con momentos duros, porque estas familias han pasado por momentos duros”, dijo.
El funcionario informó que tras las demoliciones de lo que queda de las viviendas “se trabajará caso a caso” de acuerdo a las necesidades de cada familia. Indicó que ya hay familias reinstaladas por familiares, mientras otras no cuentan con los recursos suficientes para reconstruir sus casas. Por eso, los alcaldes de la región estremecida insisten en el desembolso de fondos parte del Departamento de la Vivienda Federal (HUD en inglés) para ayudar a reconstruir, reparar o relocalización de viviendas. “Ese es el mensaje que estamos llevando, que nos envien el dinero lo más rápido posible, ya sea a través del gobierno estatal o federal, para construir viviendas y hacerle justicia a esta gente”, manifestó Rodríguez Ramos.
Originalmente, el número de estructuras familiares para demoler era de alrededor de 500, pero algunas de esas familias decidieron no esperar por el proceso gubernamental y actuar por separado.
A finales de diciembre del 2019, se comenzaron a sentir sismos de moderada intensidad en la zona suroeste hasta que el 6 de enero de 2020 ocurrieron varios estremecimientos, 5.0, 5.8., 6.4 y 5.9, que causaron graves daños a la infraestructura de la región.
