30 años despues: ¿dónde esta Elena Rodríguez Rentas?
Por Agustín Muñoz Santiago
Al cumplirse 30 años de la desaparición de la joven juanadina Elena Rodríguez Rentas, su nombre no figura en el registro de personas desaparecidas de la Policía de Puerto Rico. Sin embargo, aún las autoridades policiales de Ponce mantienen abierto el caso de esa desaparición ocurrido el 19 de octubre de 1990 en Juana Díaz.
“¿Cuán diligentes han sido los investigadores del caso por los pasados 30 años?”. Una pregunta que los familiares de Rodríguez Rentas, residentes en el barrio Collores, no pueden responder con certeza. Y, el tema del paradero desconocido de la mujer sigue siendo un misterio.
Los recientes incidentes de secuestros y desapariciones de personas en Puerto Rico han reavivado la aspiración de los parientes de Rodríguez Rentas para el esclarecimiento de la ausencia forzada de la joven.
“Lo que le hicieron a mi querida hermana lo tienen que pagar tarde o temprano. Ya por lo menos cayó uno de ellos, está sufriendo por lo mismo que pasamos nosotras, ahora a ellos lo están viviendo en carne propia, digo si es que tienen corazón, queremos justicia para mi querida hermana Elena Rodríguez”, escribió en Facebook Rosita Rodríguez.
Desde el momento de la desaparición de Rodríguez Renta, quien tenía 23 años, la Policía ha indagado sobre diversas teorías, pero al parecer ninguna los ha llevado hasta los autores de una posible conspiración. Sin embargo, los parientes de la joven insisten en que los investigadores tienen los nombre de los posibles implicados en su secuestro. Argumentan que hay evidencia contundente para encausar a los responsables del destino fatal de la mujer.
“Algo pasa que nos ocultan”, han dicho en reiteradas ocasiones, por voz de Edgardo Rentas Vargas, tío de la infortunada y portavoz de la familia.
Empero, Pedro Álvarez, quien fue supervisor de la Unidad de Homicidios de la Policía de Ponce y quien investigó el caso previo a su jubilación, respondió también por Facebook “hicimos lo imposible por conseguirla”, pero no lo logaron. “Mi conciencia está tranquila porque entre mis compañeros de trabajo y en el mío propio hicimos el trabajo (,) máxime yo más que soy de Collores, nacido y criado y conozco a toda la familia”, subrayó el ex investigador policial.
A través de estos 30 años del secuestro y posible asesinato de Elena, el caso ha sido investigado por una decena de agentes que han realizado búsquedas y removido terreno en un sector conocido como Guaraguao en Collores y hasta se exhumó un cuerpo en el Cementerio Municipal de Juana Díaz.
Los familiares también contrataron al investigador privado Milton Rodríguez Rivera.
Durante una conversación reciente, Rentas Vargas dijo a este medio que a principios de este año un individuo que supuestamente tenía información del secuestro, y quien reside ahora en Estados Unidos, le ofreció una pista donde aparentemente fue escondido el cuerpo de la fémina. “Esa persona cuando vio que yo publiqué la noticia por facebook me contactó y me llamó”, explicó. Le citó diciendo que “un fulano endrogao me llevó allí y me dijo que allí fue que la enterraron”.
Según su versión, fue en un pozo séptico que ubica en una finca aledaña al lugar conocido como “El Salto de Collores”. Rentas Vargas dijo que compartió la nueva teoría con los investigadores, pero el día en que se dispusieron a visitar el lugar descrito “empezó a lloviznar, le cogieron miedo a la lluvia y viramos”. “Como a la semana (de la visita) llegó el COVID (19) y quedó todo en nada”, lamentó.
Rentas Vargas, quien desde aquella tarde del 19 de octubre de 1990 no descansa en la búsqueda e investigación del paradero de su sobrina, insiste que en este caso hay gato encerrado.
La pesquisa de las autoridades identifica a tres sujetos interceptando a Rodríguez a la entrada de la carretera 512 que conduce del barrio Cayabo al barrio Collores de Juana Díaz. Ella regresaba de su trabajo en el hoy desaparecido Chicken and Pizza Palace, que estuvo ubicado en el barrio Pámpanos de Ponce.
La familia confía y mantiene, 30 años después, la esperanza de que los restos de la joven mujer sean recuperados y que los responsables del caso sean ajusticiados.