Por Agustín Muñoz / El Sol de Puerto Rico
Si la gobernadora Wanda Vázquez quiere aspirar “al juego político” como aspirante a ese puesto deberá “realizar trabajo de base” dentro del PNP y “desde abajo escuchar a nuestra gente”, le advirtió el candidato a la alcaldía de Villalba, Guillermo Irizarry.
“Si quiere aspirar a través de una insignia, uno tiene que hacer el trabajo de político, el trabajo electoral, el trabajo de recoger dinero y ese trabajo ella no lo ha hecho”, apuntó Irizarry al sostener que Vázquez carece de respaldo dentro de la llamada base del PNP, aunque reconoce que ha realizado un buen trabajo como sucesora de Ricardo Rosselló. Dijo que son meras especulaciones los señalamientos de que la gobernadora anunciará su disposición de buscar la posición por la vía electoral.
La gobernadora Vázquez se ha ido despegando de su discurso de apertura cuando testificó que su misión sería culminar el casi año y medio del mandato de Rosselló. Sin embargo, en reiteradas ocasiones, sus respuestas a los medios denotan intención de “correr” para esa candidatura. Las contundentes expresiones de que “las puertas de la democracia no se le pueden cerrar a nadie” son un reflejo de esa posibilidad, según analistas.
Irizarry no duda que Vázquez sea estadista, “pero a veces quiere proyectar que no es novoprogresista”.
El nuevo líder del PNP en Villalba, partidario de Pedro Pierluisi, es sobrino del empresario y exsenador Miguel Rodríguez, quien una vez compitió sin éxito por la alcaldía. Dijo que proyecta radicar su aspiración a alcalde el próximo 13 de diciembre. Asegura que no tiene retadores y sí el respaldo de los anteriores presidentes de su partido en ese municipio, entre estos, Bernardo Negrón Montalvo, de quien recibe consejos y asesoría política, según mencionó. Afirmó que bajo su liderato se logró consolidar la base de la colectividad luego de la debatida primaria del 2016 en su pueblo.
Irizarry minimizó la labor del actual alcalde, Luis Javier Hernández Ortiz, al denunciar que bajo su mandato Villalba incrementó el déficit a $13 millones y “es un municipio inoperante” con una nómina que excede su capacidad económica. “Básicamente es la misma situación que tiene Ponce y otros municipios que se dan unos jugosos contratos cuando no tienen la capacidad económica para hacerlo. No tiene ni para pagar la nómina del municipio. Aquí las carreteras parecen caminos y la flota vehicular está hecha cantos”, reveló.
Acusó Hernández Ortiz de ser un “alcalde de redes (sociales)”. “La carita es una cosa y lo que pueda proyectar, pero cuando vamos a la sustancia, es poca”, describió Irizarry.
