Colgado el gobierno en el manejo de su crisis
Ausente la verdad del escenario de explicaciones
Por Agustín Muñoz / Periódico El Sol de PR
La crisis institucional que protagoniza la presente administración de gobierno aparentemente no ha tenido como aliado un buen manejo por parte de los encargados de la comunicación pública, según entendidos en la materia.
En muchos casos, las situaciones de crisis no son previstas, es decir, surgen de manera inesperada y causan daño. En el caso del gobierno, provocan graves problemas sino se atienden de manera responsable y atinada. Por eso, la importancia de la labor del o los encargados de la comunicación pública quienes deben ser capaces de entender la crisis para establecer las maneras de enfrentarla adecuadamente.
A raíz de los arrestos de Julia Keleger (Educación), Ángela Ávila (ASES) y cuatro contratistas del gobierno, así como el cuestionado chat del gobernador en la red Telegram, se ha criticado el manejo de la crisis. Algunos comentaristas han mencionado el famoso caso Watergate que involucró al presidente Richard Nixon y la trama rusa que ha tratado de implicar al presidente Donald Trump.
Nixon dimitió el 9 de agosto de 1974 tras evidenciarse que fue participante de una maquinación para obstruir la justicia mientras se investigaba un allanamiento ocurrido en la sede del Partido Demócrata. Los medios informativos ni los estadounidenses creyeron las explicaciones de Nixon. El mandatario tampoco dejó ver su lado humano y lo peor, se afirma, “fue que no se aseguró de eliminar de raíz las causas de la crisis pensando que podría manejar el problema tratando con el Senado (federal) y presionando al diario The Washington Post para que no publicara más noticias sobre ese caso”.
En el caso de Trump, el manejo de la trama rusa por parte de su equipo de comunicaciones ha tenido buenos resultados. Actuaron inmediatamente y lograron que la gente crea que el mandatario no mintió sobre dicha controversia.
Sin embargo, el manejo de la actual situación de crisis en la administración del gobernador Ricardo Rosselló Nevares ha sido “horrible”. “El manejo (de la crisis) ha sido horrible. Se supone que la crisis tú la anticipas, no llegó de la nada. Esa crisis la sabían los comunicadores del gobierno (porque) es bien raro que la crisis te tome por sorpresa”, cuestionó una fuente ligada a los altos mandos gubernamentales y que solicitó no divulgar su identidad.
“Esto es una crisis de grandes ligas, pero las crisis se enfrentan con la verdad”, agregó.
El problema de las acusaciones por corrupción pudo ser evitado por el incumbente, de acuerdo con allegados. Incluso, el representante José Enrique “Quiquito” Meléndez (PNP) dijo a los medios que el escándalo por los casos de corrupción pudo haberse evitado ya que Rosselló Nevares y su equipo más allegado fue advertido por líderes de su partido, pero tales advertencias fueron ignoradas.
Por su parte, Jackeline del Toro, consultora en comunicaciones y manejo de crisis, pareció coincidir con la fuente y observó que la presentación del gobernador ante los medios de comunicación a su llegada de vacaciones no logró “cerrar la llave de la gasolina que alimenta el siniestro”.
“Me parece que van a seguir apagando fuego y hasta el momento no han logrado cerrar la llave de la gasolina que alimenta el siniestro. Si bien trabajar con el problema de la corrupción es imperativo, el chat destapa un problema de carácter, de manejo inadecuado y hasta cuestionable de la crisis, y hasta del uso cuestionable del poder”, abundó del Toro.
Aseguró que, para un político, perder la credibilidad es muy peligroso, si no desastroso y puede representar el fin de su carrera.
Para la comentarista y catedrática Inés Quiles, la forma en que los asesores de Rosselló Nevares han manejado la situación actual “ha sido pésimamente mal”. “Su empeño ha sido como le arreglan la imagen, que está dañada, del gobernador. No como arreglan al país que ha sufrido y se ha dañado también con ese daño de imagen del gobernador”, dijo.
Quiles opinó que la conferencia de prensa del gobernador no le ayudó a fortalecer su imagen ante el aprieto ya que supuestamente trató de engañar al país en un aparente intento de disfrazar los hechos que se le imputan. “No le ha sido posible, no lo ha logrado. Ellos son gente maliciosa, que no trabajan con la verdad, engañan, viven engañando y el plan que han hecho es ese”, juzgó.
